JORNADA DE ORACIÓN 24 HORAS PARA EL SEÑOR: EXPERIENCIAS

Unidos a toda la Iglesia universal, el viernes 9 y sábado 10 de marzo, la comunidad parroquial de O Grove, nos hemos distribuido en grupos para la celebración de la jornada “24 horas para el Señor” convocada por el Papa Francisco. Una jornada de oración y confesión, un poder acercarse al sacramento de la reconciliación en un ambiente de adoración eucarística, en este “tiempo de Cuaresma”, necesaria para poder llegar a la Pascua con un corazón convertido, para poder llegar a la Pascua más unidos al Señor.

Los griegos clásicos tenían dos palabras para definir el “tiempo”:

Kronos, que es el tiempo que pasa inexorable, tiempo de reloj, el tiempo que se destruye, se acostumbra decir “matar el tiempo” mientras que:

Kairós, es el tiempo que enriquece, aquél que dedicamos a nuestro crecimiento, tiempo favorable, tiempo de salvación.

En esta jornada de oración, hemos vivido un “kairós”, en sentido cristiano, un tiempo de gracia, un compartir la victoria de Dios en nuestro presente, gozar y alegrarse por lo que nos permite vivir cada día, por lo que hace en nosotros y en nuestra historia, sin desesperar en ningún momento, gozando de su presencia, gozando de su paz.

La Cuaresma es tiempo propicio de oración, oportunidad de abrirse al soplo del Espíritu, tiempo de vivir el hoy de Dios, “Es necesario que hoy me quede en tu casa” (Lc 19,5). Es necesario que Cristo entre en nuestra casa, porque Dios manifiesta en Él su misericordia y, la misión que tenemos en la vida es acoger el amor de Dios manifestado en Cristo Jesús, hasta poder decir: “Estás Señor, yo sé que estás, esperando siempre a mi puerta por si quiero dejarte entrar”.

(Isabel F).

El pasado viernes día nueve, a las 8 de la mañana, se inició con un Misa solemne, la exposición del SANTÍSIMO, hasta que ininterrumpidamente se clausuró con igual solemnidad el sábado también a las ocho de la mañana igualmente con Misa.

Durante estas veinticuatro horas que duró la exposición en todo momento la capilla de San Roque estuvo concurrida de adoradores, sin faltar ni un solo minuto, feligreses adorando día y noche con una gran devoción.

Este año nos confirmó que la fe sigue viva en la Parroquia, lo que nos llena de esperanza. Instamos a los que no pudieron asistir que en el próximo año se unan a este acto tan solemne de adoración a CRISTO SACRAMENTADO, de tan gran éxito y por ello nos mueve a su continuación, en la seguridad que la fe de San Martín de O Grove, se mostrará siempre.

GRACIAS A TODOS. SIGAN A CRISTO.

(Miguel L.)